lunes, 24 de noviembre de 2025

Reseña: "La guerra de Sertorio" de Francisco Romeo



La guerra de Sertorio. Hispania y el ocaso de la República de Roma, de Francisco Romeo Marugán, es uno de esos libros que uno abre pensando que va a encontrar una historia militar… y termina descubriendo un retrato humano, político y casi épico de un personaje que Roma prefirió olvidar. 

Sertorio, general hábil y cabezota, convertido en proscrito por la dictadura de Sila, encontró en Hispania no solo un refugio, sino un escenario desde el que replantear (a su manera) qué podía ser Roma.

Romeo reconstruye la historia con un rigor. Se nota la mano del historiador y arqueólogo que no se conforma con repetir lo que dicen las fuentes, sino que las interroga, las cruza con la arqueología y las observa. El resultado es una narración clara, donde cada batalla, cada pacto con las comunidades hispanas y cada giro político se entienden dentro de un panorama más amplio: el desgaste de una República que ya no sabía ni qué defendía.

Para mí, uno de los aspectos más geniales del libro es cómo el autor separa al Sertorio real del Sertorio legendario. Porque sí, a este hombre le ha acompañado siempre un aura casi romántica: el general justo, el estratega brillante, el líder que respetaba a los hispanos más que muchos romanos. Romeo no niega esa imagen, pero la coloca en su sitio, mostrando cómo se construye un mito, cómo lo transmiten los autores antiguos y cómo lo reinterpretamos hoy.

Uno de los capítulos más interesantes del libro es, sin duda, el dedicado al mito de Sertorio. Romeo aprovecha este tramo para apartarse un momento de la cronología estricta y adentrarse en un terreno que a mí, personalmente, me encanta: el de cómo un personaje de carne y hueso, con sus luces, sus sombras y todas sus contradicciones, termina convertido en un símbolo casi legendario. Para mí, lo más intereasnte de este capítulo es cómo nos obliga a reflexionar sobre la memoria histórica. Sobre cómo las fuentes antiguas (tan influidas por la propaganda, la rivalidad política o las simpatías personales) construyen un Sertorio que quizá nunca existió del todo. Y sobre cómo la historiografía moderna, lejos de corregirlo por completo, a veces también participa en esa idealización. 

Otro de los capítulos que más he disfrutado es el dedicado a la reconstrucción histórica, donde el autor muestra con mucha claridad cómo se “arma” el pasado cuando las piezas que tenemos son fragmentarias, contradictorias o directamente silenciosas. Aquí Romeo no se limita a repetir lo que cuentan las fuentes antiguas, sino que las analiza de forma crítica y las coloca frente a frente con los datos que hoy aporta la arqueología. Es un capítulo que explica de forma impecable cómo trabaja un historiador de la Antigüedad cuando quiere ir más allá del relato tradicional. 

La obra está escrita con claridad. Es seria, bien documentada y rigurosa. Quienes ya conozcan las guerras civiles romanas disfrutarán especialmente, pero también cualquier lector curioso encontrará aquí un episodio apasionante. 

En definitiva, un libro lleno de matices, que devuelve a Sertorio el lugar que merece y nos recuerda que, a veces, las historias más reveladoras ocurren lejos del Senado, en los márgenes donde los cambios verdaderos empiezan a fraguarse. 

Un estudio imprescindible para quienes amamos la Antigüedad… y para quienes creemos que, en el fondo, siempre merece la pena volver sobre las vidas de aquellos que se atrevieron a desafiar a Roma.

martes, 18 de noviembre de 2025

Reseña: "Las máscaras de Julia", de Sandra Parente




Sandra Parente, en Las máscaras de Julia, nos introduce en los pasillos dorados y las arenas movedizas de la Roma augustea con el fin de revelarnos no solamente el poder político, sino también la importancia que tienen los silencios familiares y las apariencias. La novela, desde el principio, evoca una sensación casi teatral que recuerda el Yo, Claudio de Robert Graves.

La autora, ambientando la obra en la Roma de los inicios del siglo I, describe a Augusto como un princeps implacable que, bajo el pretexto de restaurar la República, construye un imperio sólido mediante el control. La novela se fundamenta en esa dualidad entre lo que aparentan y la realidad: las conspiraciones, el conflicto interno y una dinámica familiar perjudicada por la obediencia se esconden tras la concordia oficial.

El personaje de Julia (la Mayor), hija del César, sufre acoso por denuncias de adulterio mientras su mundo se desmorona: exilio, humillaciones públicas... Parente no la muestra como una simple víctima, sino como una mujer cautiva de la política, el honor y la dominación masculina.

Pero no solo es su historia lo que importa. Julia la Menor, hija de ella (la nieta de Augusto), después de varios años, inicia un viaje para reconstruir el pasado de su madre; busca diferenciar entre la versión oficial y la verdad que estaba escondida.

Parente tiene la sensibilidad de una historiadora: su preparación en arqueología e historia antigua es evidente en la precisión con que retrata a la Roma de su novela. No obstante, también posee la capacidad necesaria para dar forma a una narración íntima y coral, donde cada personaje (Tiberio, Livia, Julila, Julia y Augusto) tiene su propia máscara, dolor y secreto.

La longitud (552 páginas, según la ficha) no es aplastante porque Parente sabe regular el ritmo de manera adecuada: hay instantes de duelo, revelación, reflexión y conspiración. El libro se lee en un suspiro porque consigue mantener la tensión del "qué pasará" en cada página.

Una de las grandes virtudes de la novela es su habilidad para entrelazar lo privado (familia, maternidad, amor) con lo político (poder, propaganda, represión). La imputación de adulterio contra Julia no es únicamente un escándalo moral. Es, en realidad, una táctica más dentro del juego de poder del imperio.

Otro tema esencial es la memoria y cómo se construye la historia. Julila, al indagar acerca de su madre, pone en duda la "historia oficial". Parente sostiene que la verdad puede estar oculta detrás de las máscaras familiares e institucionales y que lo recordado no siempre es lo que ocurrió.

Además, se trata del rol de la mujer en una sociedad dominada por hombres y de qué manera la voz femenina, a pesar de ser silenciada en ocasiones, puede resistir y reescribir su propia historia.

Para mí, Las máscaras de Julia es una mezcla brillante de sensibilidad literaria y de rigor histórico. Parente no solamente reconstruye un periodo de la historia, sino que también humaniza a las figuras históricas. Julia ya no es simplemente un nombre en un libro de historia, sino una mujer con cicatrices, temores y aspiraciones.

Esta novela me ha hecho recordar por qué la historia antigua es tan cautivadora y que, además de las guerras (¡qué hartos estamos muchos lectores del género de ambientación histórica de la antigua Roma de los soldados y las batallas!), se trata de historias familiares, de secretos y de poder. Parente consigue que lo político y lo íntimo se crucen de una manera que conmueve y educa a la vez.

Las máscaras de Julia es una novela que, al quitarse las máscaras, muestra no solo verdades escondidas. Enseña, también, heridas, aspiraciones y la complicada trama familiar que envolvía a la dinastía de Augusto. 

 En suma, es un trabajo que rinde homenaje a la esencia de la divulgación histórica: divertir, conmover y enseñar.

viernes, 24 de octubre de 2025

Reseña de libro: "El infinito en un junco" de Irene Vallejo





Hay libros que no solo cuentan una historia, sino que nos devuelven a la raíz misma del acto de leer. El infinito en un junco (2019), de Irene Vallejo, es uno de ellos. Con una prosa luminosa y erudita, la autora zaragozana teje un viaje fascinante por la historia del libro en el mundo antiguo, desde los rollos de papiro de Alejandría hasta la invención del códice y la expansión del saber por el Mediterráneo.

Si aún no has leído, te aviso: tienes entre tus manos algo más que un manual de historia académico; ojo, tampoco es un ensayo. El libro de Irene Vallejo es, ante todo, una declaración de amor por los libros, por quienes los escriben, los copian, los esconden o los salvan de las llamas. La autora mezcla la erudición clásica con la emoción íntima del lector que se sabe heredero de miles de años de palabras. Su narración salta con naturalidad de los copistas griegos a Borges, de los mitos homéricos a los profesores que nos marcaron, de Cleopatra a su propia infancia en Zaragoza.

El resultado es un texto que emociona tanto como enseña: una obra que rescata la memoria del libro como objeto y como símbolo de resistencia frente al olvido. Irene Vallejo logra algo difícil: convertir la filología en un acto poético y político. Cada página celebra la fragilidad y la permanencia del conocimiento, la “epopeya del libro” que, como ella misma dice, es también “una historia de fantasmas, de los que escriben y de los que leen”.

Además, hay mucho de ella en cada página: recuerdos, confidencias, una mirada íntima sobre la lectura y el consuelo que los libros le han ofrecido. Ese tono confesional, a veces casi poético, dota al texto de una calidez poco habitual en la divulgación, y hace que leerlo sea un placer estético, casi físico, de esos que obligan a subrayar y releer. 

Se le puede reprochar que su estilo, a veces exuberante, puede resultar demasiado lírico para quienes prefieren un ensayo más sobrio o académico. Y es que Vallejo se deja llevar por la emoción (y esa es parte de su encanto), pero en algunos pasajes la erudición y la belleza del lenguaje compiten por el protagonismo, ralentizando la lectura. Además, tiene una visión idealizada del mundo clásico, en la que los libros parecen casi milagrosamente salvados del olvido, con menos atención a los contextos sociales o materiales de su transmisión.

Aun así, incluso esas “imperfecciones” son coherentes con el espíritu del texto: El infinito en un junco no busca ser un tratado, sino una elegía, una carta de amor al libro. Y como toda carta apasionada, se permite la emoción por encima de la precisión.

En su defensa apasionada del libro, Irene Vallejo convierte la filología en arte y el conocimiento en un acto de amor. El infinito en un junco se lee como una novela y se recuerda como un viaje: un homenaje a quienes escriben, leen y mantienen viva la palabra.

domingo, 19 de octubre de 2025

Libros para leer la noche de Halloween y aprender historia antigua






Octubre es el mes perfecto para dejarse envolver por el misterio. Pero no hace falta buscar fantasmas en mansiones misteriosas y cementerios lúgubres. Los antiguos griegos y romanos ya hablaban de almas en pena, casas encantadas y apariciones que recorrían las calles de las ciudades de estos pueblos de la antigüedad.

Te propongo una selección de libros que nos devuelven a ese otro mundo antiguo. El de los espectros, la magia y los temores que acompañaron a nuestros antepasados. Todos ellos con rigor histórico y sin necesidad de recurrir a la ficción moderna. Desde ensayos sobre creencias y rituales hasta testimonios de los primeros "fantasmas" documentados de la antigüedad, son lecturas ideales para quienes aman la historia... y disfrutan de un buen escalofrío.

- I -

"Fantasmas, brujas y magos de Grecia y Roma" de Fernando Lillo para Evohé.






Es un ensayo histórico centrado en la Grecia y la Roma antiguas que aborda los fenómenos de fantasmas, brujería, magia y creencias populares en esos mundos antiguos.

¿Por qué es idónea para Halloween? Porque mezcla los elementos clásicos del terror (“fantasmas”, “brujas”, “magos”) con un contexto de historia antigua, lo que le da un matiz distinto al típico libro de terror moderno.

Tip: Léelo por la noche, quizá acompañado de una luz tenue o un rincón que resuene con el misterio del pasado.


- II - 

"Historias de fantasmas y miserio de la Antigüedad" de Manuel Garrido, Jesús Masiá Moreno, Miguel Navarro Aljibe, Teresa Gail, María Dolores Martín, María Jesús Masiá, María Consuelo Sánchez para la editorial Tilde.


Antología de textos clásicos traducidos al castellano que recogen relatos y creencias de la antigüedad (Grecia-Roma) acerca de fantasmas, casas encantadas, hechicería, etc.

¿Por qué es idónea para Halloween? Porque te traslada a un mundo antiguo donde lo sobrenatural se entremezcla con lo cotidiano, desde la perspectiva de la antigüedad clásica. Una lectura diferente al típico libro de terror contemporáneo.

Tip: Ideal para leer capítulos sueltos.


- III -

"Soldados y fantasmas: mito y tradición en la Antigüedad clásica" de J. E. Lendon para la editorial Ariel.




Ensayo histórico que aborda cómo en Grecia y Roma antiguas la tradición, el mito y hasta lo fantasmagórico (o lo considerado “fantasmas de la tradición”) influían en la guerra y la cultura militar.

¿Por qué incluirlo para Halloween? Aunque no es terror puro, tiene ese elemento “fantasmal” al hablar de los “fantasmas de la tradición” que acompañaban a los soldados antiguos, lo que le da un toque inquietante y reflexivo.

Tip: Si prefieres algo más “serio” que novela de terror, pero aun con ambiente misterioso y antiguo, este encaja muy bien.


- Como extra, te dejo un libro más -


Yo estos días voy a leer "Oscura Roma" de Luis Manuel López Román para Esfera de los libros.


Una novela de ambientación histórica que se desarrolla en la Roma del año 67 a. C., donde hay crimen, hechicería, magia, brujas y un ambiente oscuro. Promete mucho. Ya os contaré...








martes, 26 de agosto de 2025

Reseña: Hoy una película, "El regreso de Ulises"

 


Ficha técnica:

Dirección: Uberto Pasolini
Reparto: Ángela Molina, Charlie Plummer, Chico Kenzaria, Claudio Santamaría, Juliette Binoche, Ralph Fiennes
Duración: 116 min.
Calificación: No recomendada para menores de 12 años
Género: Acción, Aventuras, Drama
Nacionalidad: Italia
Idioma: Inglés
Estreno: 22 de agosto de 2025
Distribuidora: A CONTRACORRIENTE FILMS

Sinopsis:

Tras 20 años de ausencia, Odiseo aparece en las costas de Ítaca, demacrado e irreconocible. El rey ha regresado por fin a casa, pero muchas cosas han cambiado en su reino desde que partió para luchar en la guerra de Troya. Ahora, se verá obligado a enfrentarse a su pasado para salvar a su familia y recuperar el amor que ha perdido.


Reseña:

Antes de comenzar con la reseña, quiero hacerte una advertencia.  Si crees que vas a ver una película de ambientación histórica, estás muy equivocado.  "El regreso de Ulises" no es nada de eso.  Está llena de errores, por supuesto.  Ni el palacio de Ítaca está bien ambientado, ni el telar es el correcto, ni el armamento, el vestuario... Deja tu inmensa sabiduría sobre el contexto histórico de la guerra de Troya y siéntate en la butaca para disfrutar de algo diferente, porque el objetivo del director no es ser fiel a la historia, sino hacer una obra actual, una evolución de la historia de Penélope a los tiempos bélicos que corren en la actualidad.  

"El regreso de Ulises" es un canto a la paz. A que nos sintamos avergonzados por la violencia.  A ser críticos con los momentos convulsos que vemos más allá de la frontera de Europa.

Esta es una película de reflexiones morales, su tono sosegado y visión nada comercial.

Si algo destaca desde el principio de la película, es que Pasolini deja atrás la grandilocuencia épica y los mitos divinos para regresar al terreno humano. Su Odisea se despoja deliberadamente de todo lo sobrenatural, mostrando un Ulises envejecido y casi roto, marcado por un trauma bélico profundamente moderno.

El héroe no es glorioso, sino frágil. Ulises es, con mirada atormentada, una reconstrucción de sí mismo tras años de guerra. Es más un ser abatido, ya no es el astuto guerrero homérico. Es un hombre cansado y lleno de temores.  Un héroe convertido en un cobarde. El motivo es muy obvio. Él no es el protagonista de esta historia.  

La protagonista es ella, Penélope. Ella eclipsa la acción de él, su historia.  Ella teje y desteje, no esperando a Ulises, sino intentando sobrevivir a un futuro que sabe que va a llegar, pero del que quiere distanciarse. Cree que Ulises no volverá, pero no tiene la certeza. Mientras sopesa su futuro y valiente lo afronta, sabiendo que no tiene escapatoria, que está engullida por el mañana.  Está atrapada y no tiene salida. Y mientras lucha por mantener su poder y su dignidad.

Juliette Binoche y Ralph Fiennes llevan el peso de la película de una forma tan sutil como poderosa. Fiennes da vida a un Ulises profundo: más viejo, fuerte y marcado por una mezcla de cansancio y determinación que habla de sus arrepentimientos y de lo que ha tenido que soportar. Por su parte, Binoche interpreta a una Penélope fuerte y digna. Aunque está dolorida, su mirada sigue firme, sosteniendo una fidelidad que duele y un rencor contenido bajo la superficie.

La puesta en escena deja de lado los grandes escenarios mitológicos y se centra en una estética sencilla y casi teatral, usando únicamente lo imprescindible para contar la historia. Los interiores cuidadísimos, una iluminación suave y los pequeños detalles del vestuario y los objetos (como la ropa, los muebles y los utensilios) hacen que el mundo que vemos se sienta íntimo, cercano y lleno de emociones contenidas.

La película avanza con un ritmo pausado, incluso un poco monótono en momentos. Es de esas historias que invitan a pararte, respirar y sumergirte: cada gesto, cada silencio, está cuidadosamente pensado. Nada brilla por su majestuosidad, nada se exagera. La emoción no viene de grandes escenas, sino de lo íntimo, de los silencios que hablan por sí solos.

Las frases de Ulises y Penélope, como “¿Por qué los hombres encuentran la guerra y no el camino a casa?” o “Para algunos la guerra se convierte en su casa”. Son recordatorios de que la guerra, aquí, no es legendaria: es actual, devastadora y psicológica.

"El regreso de Ulises" no busca el aplauso o el choque visual: es un estudio íntimo, una tragedia declinada en voz baja. Ulises ya no es figura de leyenda, sino de carne y hueso, más cercano. Su regreso a Ítaca no es una celebración, sino una rendición: contra el mito, contra la guerra, contra el olvido. Y Penélope no es solo la reina que espera; es quien representa el auténtico ejercicio de resistencia emocional.

Una revisión del mito y una actualización del mismo, digna de los tiempos en que vivimos, donde la guerra es una constante en las noticias, la prensa y las redes sociales. 


domingo, 3 de agosto de 2025

Mis lecturas del mes de julio. Próximas reseñas

 Prostitutas de la antigua Grecia.

La verdad de las fuentes textuales

Joana M. Otón
Ed. Rhemata, 2021

ISBN: 9788412020960

Mi valoración: ☆☆






Sinopsis de la editorial:

A través de un anecdotario recogido por eruditos de la época, el lector se adentrará en la biografía de 17 prostitutas de la Antigua Grecia.

Los escritos, cómicos a veces, dejarán también entrever un fragmento de aquella otra realidad de la que fueron protagonistas y en la que se pondrá en evidencia la brutal cotidianidad en la que se desarrollaron sus vidas, sin olvidar la mención a la controvertida figura de la hetera.

Unas prostitutas cuyos tiempos recorrerán del s. VI al III a. C., y cuyas vivencias nos darán a conocer detalles ignorados o pasados por alto de la Historia de Grecia.

Queridas de faraones y de filósofos convivirán con otras de menor suerte, aunque todas y cada una de ellas nos brindarán una visión variopinta y diversa de una realidad histórica de Grecia que, tal vez, se nos había hurtado.

En definitiva, una invitación a todo curioso del mundo clásico para discernir la verdad a partir de las fuentes textuales de una tradición helénica, que no escatimó en detalles para describir a ellas y a sus amantes.

El mundo es un pañuelo

David Lodge
Ed. Anagrama, 1998

ISBN: 9788433914613

Mi valoración: ☆☆




Sinopsis de la editorial:


Un joven profesor universitario se enamora perdidamente de una bella y misteriosa muchacha a la que conoce en un seminario de literatura y se lanza en su persecución por medio mundo. Viaja de un congreso académico a otro, con continuos cambios de continente, y en su periplo en pos de su amada se va topando con una variopinta fauna de intelectuales de postín y prestigiosos académicos, conferenciantes internacionales para los que los aviones se han acabado convirtiendo en su verdadero hogar. David Lodge retrata el enloquecido mundo de esta errante tribu cultural en el que reinan las envidias, intrigas, zancadillas, bajos instintos, arrebatos de lujuria y mezquindades varias con una jocosa ironía y crea una comedia repleta de situaciones desternillantes, en la que además se permite jugar con guiños tomados de las novelas románticas y del ciclo artúrico y dar un divertido y malévolo repaso a las teorías literarias hoy día en boga.

Memorias de Adriano

Marguerite Yourcenar (trad. Julio Cortázar)
Ed. Pocket Edhasa, 1999

ISBN: 9788435018395

Mi valoración: ☆☆


Sinopsis de la editorial:

Alabada unánimemente por la crítica como una de las obras más singulares, bellas y profundas de la literatura del siglo XX y considerada a menudo la primera novela posmoderna, "Memorias de Adriano" marcó un hito en el género de la narrativa histórica y descubrió al mundo una auténtica obra maestra del arte narrativo.

La espléndida traducción de Julio Cortázar ha contribuido a atraer constantemente a nuevos lectores interesados en el emperador del siglo II, "casi un sabio", que fue tal vez uno de los últimos espíritus libres de la Antigüedad.

Julio César. 

Un dictador democrático

Luciano Canfora
Ed. Ariel, 2025

ISBN: 9788435018395

Mi valoración: ☆☆




Sinopsis de la editorial:


Julio César es sin duda uno de los grandes personajes de la historia universal. Conquistador de territorios, forjador de un imperio, líder político y «dictador democrático» que, tras su asesinato, su figura fue elevada a arquetipo hasta convertirse en uno de esos extraños personajes que hacen la historia. Luciano Canfora, uno de los grandes historiadores del siglo XX, traza en este libro un completo perfil de César. El resultado es un retrato en claroscuro, en el que aparecen los grandes logros y los grandes fracasos del emperador. Porque, ¿quién fue en realidad Julio César. Esta biografía responde a este y otros muchos enigmas en torno a la fascinante figura del emperador romano.


sábado, 2 de agosto de 2025

Reseña: "La vida es un pañuelo"

El mundo es un pañuelo
David Lodge
Ed. Anagrama

ISBN: 9788412763188

Mi valoración: ☆☆☆☆



David Lodge (Londres, 1935) es un escritor, crítico literario y profesor universitario británico, conocido sobre todo por sus novelas satíricas ambientadas en el mundo académico. Su obra combina humor, erudición y una aguda observación de las tensiones entre cultura, religión y vida cotidiana.

Lodge fue profesor de literatura inglesa en la Universidad de Birmingham, donde enseñó durante casi 30 años. Sus intereses académicos se centraron en la novela inglesa del siglo XX, la teoría literaria y el catolicismo en la literatura, temas que también aparecen en su ficción. Ha escrito influyentes ensayos sobre teoría literaria, como El arte de la ficción (The Art of Fiction, 1992), un libro accesible y brillante que explica técnicas narrativas a través de ejemplos literarios.

Aunque este no es un libro sobre historia antigua, tiene su punto de enlace y ahora veréis el motivo.

La protagonista de El mundo es un pañuelo es la vida académica. Aunque en este caso está centrado en la especialidad de literatura, puede ser aplicable a cualquiera de las carreras universitarias. Un aviso: la historia está ambientada en los años 80, así que alguno de los guiños es ya parte de la historia. Un mundo académico sin ordenadores, móviles y correos electrónicos. Así debía ser la vida de un profesor de universidad en el mundo analógico.

Estamos ante una comedia, eso que quede claro, pero al más puro estilo inglés. Lodge nos presenta una parodia de la vida de los profesores universitarios. Se mezclan enredos, sexo (mucho sexo), literatura... En realidad, se trata de la segunda entrega de una trilogía que comienza con Intercambios y es seguida por Buen trabajo, aunque puede leerse perfectamente de forma independiente.

La novela sigue los pasos de Persse McGarrigle, un joven profesor irlandés bastante ingenuo que, tras su primera asistencia a un congreso internacional de literatura comparada, se ve arrastrado a una serie de viajes por todo el mundo para encontrar a una joven académica misteriosa (y muy escurridiza) de la que se enamora a primera vista en uno de los descansos entre comunicaciones. La joven se llama Angelica Pabst y es doctoranda.

Lo más interesante de la novela es que Lodge estructura la novela como un romance medieval. Un héroe persigue un ideal inalcanzable. Tiene que superar obstáculos. Hay momentos de sabiduría y aprendizaje. Incluso hay villanos bastante ridículos.

Ironía, parodia, comedia mordaz y muy inteligente al más puro estilo inglés.

Y entre toda esa trama aparece el cinismo de ciertos académicos, la lucha por plazas académicas, las publicaciones, las reseñas, las críticas entre profesores, la ansiada estabilidad laboral, la banalidad de los circuitos de congresos, la vanidad de algunos académicos, líos de faldas, abuso de alumnos... Un mundo basado en los contactos, los amiguismos, sin interés por los méritos. Un mundo que Lodge conoce a la perfección y que seguro que a muchos les suena todo esto; aunque estemos en el siglo XXI, hay cosas que no cambian.

Si eres universitario, académico o profesional de la universidad, vas a encontrar muchos guiños que te van a resultar muy cercanos.